Mira cómo son las cosas...
Mis ojos, cansados de llorar, decidieron mirarte con la intención de encontrar algún refugio. Pero no lo encontraron, y lejos de eso sólo hallaron el deseo de refugiarte y las ganas de proteger con su débil destello la sobriedad de los tuyos.
Te amo y sabes que tu felicidad está por encima de la mía.
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1 comentario:
saludos vero
De nuevo eh venido para ver tu blog
y cada vez veo que lo haces mas con el corazon casi puedo sentir el cansasio de uno ojos llorosos en busca de un sosten.
sige asi verito
atte: Ulyses "señor e los nocturnos"
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